“Contribuimos a formar no a los mejores del mundo, sino a los mejores para el mundo”
P. Adolfo Nicolás, S.J.
La Dirección de Formación Ignaciana impulsa y promueve la tradición educativa Jesuita, respaldada por la Compañía de Jesús por más de 480 años, con espiritualidad propia y el sello de la pedagogía basada en la herencia de los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola.
Tenemos como objetivo fundamental propiciar en la comunidad educativa la experiencia de Dios, desde donde cada persona puede construir su sentido de vida y la manera en que se relaciona y compromete con el mundo desde la propuesta de Jesús.
Nuestro proyecto formativo que va desde Maternal hasta Bachillerato, incluye tres experiencias que se viven en los siguientes momentos a través del Paradigma Pedagógico Ignaciano:
Se llevan a cabo dentro de sus clases de Formación Ignaciana a través del Paradigma Pedagógico Ignaciano.
Buscamos involucrar al estudiantado con las diversas personas en situación de pobreza que padecen en su contexto injusticias estructurales sociales, con la intención de desarrollar en el estudiante, desde la niñez hasta la juventud, el compromiso de construir juntas y juntos un mundo más solidario, inclusivo y humano.
Es el momento explícito en que se orienta a la presencia del Dios de Jesús al modo de Ignacio de Loyola en todas las realidades, acompañamos estas experiencias a través de pausas ignacianas, retiros, Misiones Lux, celebración de los Sacramentos, voluntariado, eucaristías, Ejercicios Espirituales.
Participamos en programas y actividades que promueve la Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús y en talleres internacionales organizados por la FLACSI que promueven el liderazgo ignaciano.
Completamos nuestro proceso formativo ignaciano de la comunidad educativa promoviendo actividades que tienen como fin llevar a la acción las invitaciones que nos comprometen en la construcción de un mundo más justo para todas y todos.
Parte de la oferta de esta Dirección involucra también a familias, docentes y colaboradores Lux en proyectos pastorales y sociales, con la intención de identificarnos como una comunidad ignaciana.